Vecinos y ambientalistas aseguran que la empresa productora de pesticidas y herbicidas arroja residuos tóxicos al Río Paraná o los entierra en terrenos apropiados ilegalmente. Las denuncias contra la compañía comenzaron en 2007. "Hay un derrotero judicial de complicidades que los protege, al igual que los funcionarios de los organismos responsables del control", indicaron desde la Corriente Nacional Martín Fierro.
En el marco del Día Internacional del Medio Ambiente, vecinos y ambientalistas llevaron este jueves a las 11.00 una multitudinaria protesta contra la compañía Atanor S.C.A. en la puerta de la casa matriz de Atanor, ubicada en Munro.
"Una de las claves de Atanor S.C.A. es su visión para lograr un desarrollo sustentable, en equilibrio permanente con el medio ambiente", indica la empresa en su página web oficial. Sin embargo, los denunciantes afirman que la filial de San Nicolás -que produce pesticidas y herbicidas- "está contaminando gravemente la tierra y el Río Paraná, arrojando residuos tóxicos al agua o enterrádolos en terrenos fiscales que se apropiaron ilegalmente".
En ese sentido, integrantes de la Corriente Nacional Martín Fierro confirmaron que hay vecinos y trabajadores con la salud afectada. "Hay varias denuncias presentadas y un derrotero judicial de complicidades que los protege, al igual que los funcionarios de los organismos responsables del control", indicaron.
"Muchos de los que hoy componen las ONGs son ex trabajadores de Atanor. Saben de primera mano lo que hace la empresa con sus residuos. La primera denuncia fue presentada por delegados gremiales de la empresa, que luego fueron despedidos y denunciados por calumnias e injurias y que, por suerte, terminaron absueltos por la Corte Suprema de Justicia bonaerense, que en 2009 incluso ordenó a la Cámara Penal de San Nicolás una investigación por el enterramiento irregular de residuos tóxicos", señalaron.
Atanor registra hechos de conflictos por contaminación en otras plantas del país. En el caso la sede de Vicente López, la fábrica estuvo clausurada preventivamente por el municipio. Asimisimo, la empresa fue denunciada por un accidente en San José de la Esquina, provincia de Santa Fe, cuando el vuelco de un camión ocasionó el derrame de18.000 litros de 2,4-D, un poderoso herbicida que se sintetiza en la planta de Río Tercero.
La compañía de origen israelí, que es el resultado de la fusión de Makhteshim (fundada en 1945) y Agan (de 1952), para la fabricación de productos agroquímicos es una de las grandes operadoras mundiales del sector. Albaugh es un fabricante líder de productos fitosanitarios con patentes vencidas que opera en gran parte de América y China. Fundada en 1979 por Dennis Albaugh, la compañía tiene sede en Ankeny, Iowa, Estados Unidos. En la Argentina, el grupo es propietario de Atanor, la empresa que maneja las fábricas localizadas en Banda del Río Salí y en Marapa (antes también operaba el Leales).
Aprovechando el Día Mundial del Medio Ambiente, unos 50 vecinos de San Nicolás viajaron hasta la casa central de la firma Atanor en la localidad de Munro para protestar contra la contaminación que genera la planta que produce pesticidas y agroquímicos.
Allí consiguieron por primera vez en siete años la apertura de un canal de diálogo con la empresa química, que se comprometió por escrito a consultar a su casa matriz en los Estados Unidos acerca de la posibilidad de liberar la costanera de San Nicolás, ilegalmente cerrada. El jefe de Asuntos Corporativos de Atanor, Agustín Herrera, se comprometió también a realizar los estudios ambientales y del agua para volver a juntarse próximamente con los vecinos.
La lucha se inició cuando Walter Ibarra, delegado de la Comisión Interna de esa empresa, verificó que Atanor no llevaba adelante los procesos legales para la eliminación de sus residuos.
"La empresa regaba las barrancas con químicos, los días de lluvia abría las piletas y mandaba todo al río Paraná y enterraba los residuos de productos", dijo Ibarra a Tiempo Argentino. Cuando, en 2007, la Comisión interna interpuso la denuncia, Atanor despidió a los delegados y les hizo juicios por desafueros, además de querellarlos por calumnias e injurias. Los trabajadores fueron finalmente absueltos por la Corte Suprema de Justicia bonaerense.
Los vecinos de la planta aseguran que en los últimos años hubo en el barrio aledaño unas 300 muertes vinculadas al desmanejo de la compañía. "Hay un dato insoslayable: según el Colegio de Farmacéuticos, la farmacia del barrio es la que más medicamentos oncológicos vende de toda la región", dijo José Martínez, integrante de la Agrupación Martín Fierro del barrio, que acompañó a los pobladores a la planta de Munro. En un colectivo alquilado, llegaron los vecinos más afectados, mujeres que enviudaron o quedaron con las piernas maltrechas, denunciaban, como efecto de la falta de inversión de Atanor.
En la jornada también estuvo Alba Ale, guardaparque bonaerense, que visitó la zona para asesorar a los vecinos. "Como militantes medioambientales y como profesionales guardaparques constatamos que los desechos químicos marcan la barranca de la costa, nos quedó por semanas el olor picante en la nariz y la garganta. Vimos además que la biodiversidad está devastada: quedó la vegetación exótica resistente, los químicos hicieron desaparecer a toda la flora y fauna autóctona", explicó.
Tras la reunión, el secretario general bonaerense de la Martín Fierro, Nahuel Beibe, dijo: "No queremos que se afecte la fuente laboral porque la recuperación del trabajo es uno de los pilares del proyecto que conduce nuestra presidenta, lo que pedimos es que la empresa haga las inversiones necesarias para el tratamiento de los residuos tóxicos y que la provincia –que lamentablemente se desentiende del tema– garantice que los organismos de control ambiental cumplan con sus responsabilidades."